La Comunidad de Madrid trata de reponerse al paso de la borrasca Filomena con todos los medios disponibles. Uno de los frentes más prioritarios es verificar el estado de los centros educativos de la región, a los que los estudiantes madrileños tendrán que volver el próximo lunes 18 de enero.
El Gobierno regional prorrogó esta semana la suspensión de las clases presenciales hasta el citado día porque la gran cantidad de nieve acumulada, el hielo y, en muchos casos, la caída de árboles en recreos y jardines y el colapso de algunos tejados hacía imposible la vuelta al cole este miércoles, como estaba previsto.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, ha asegurado que el objetivo que se han marcado es que todos los alumnos puedan volver a sus clases el lunes, aunque ha reconocido que en algunos casos ese retorno se puede retrasar por la existencia de desperfectos que no hayan podido ser solventados en estos días.
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