La vacuna contra el coronavirus se ha convertido en algo casi de vida o muerte. Por eso, un anciano francés de 88 años se jugó la vida en carretera para llegar a tiempo a recibir su pinchazo.
El anciano fue pillado cuando circulaba a 191 kilómetros por hora en una zona limitada a 110, cerca de Estrasburgo. Según los agentes, el anciano conductor “justificó su exceso de velocidad por un retraso en su cita para la vacuna anti-Covid…”.
La publicación en Facebook de los agentes de Estrasburgo en la que relataban la historia fue compartida más de 1.100 veces, recibió 564 reacciones y más de 400 comentarios.
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