
El reventón de una tubería en la glorieta de Marqués de Vadillo y las lluvias que cayeron ayer desde por la mañana en Madrid desataron el caos en la zona sur de la almendra central. La M-30 tuvo que ser cortada por las inundaciones sufridas en los tramos subterráneos y provocó auténtico caos circulatorio en la zona.
Se calcula que se vertieron alrededor de seis millones de litros de agua. También se vieron afectados vecinos y comerciantes, cuyos garajes y negocios yacen encharcados. Los bomberos tardarán al menos dos semanas en reparar la tubería, de 50 centímetros de diámetro.
Comparte esta noticia




iVoox